“¿QUIÉN ME HA TOCADO?” CON FE
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
PALABRA DE DIOS
5 minutos en nuestro "día a día"
(Clic en los textos para leer)
4 FEBRERO CICLO C
Que
Dios nos dé la Gracia de avanzar en la
fe,
por el conocimiento de su Amor revelado en la Vida cotidiana, que Jesús
vivió “como
uno de tantos”.
El
Evangelio no es para leerlo con el fin de conocer los dichos y
hechos de Jesús pasados en su tiempo.
Jesús
es Dios y Hombre verdadero; por
lo que su Vida tenía trascendencia
eterna. Esto nos exige leer
el Evangelio, no como memoria de los hechos, sino como realidad de presente, que nos plantea nuestra respuesta ante
la experiencia de lo que vemos y tocamos.
Acompañemos
a Jairo,
jefe de la sinagoga, escuchando
su lamento con fe.
“Mi niña está en las últimas;
ven, impón las manos sobre ella,
para que se cure y viva”
Jesús se fue con él y lo seguía mucha gente; hoy, tú y yo, conmovidos por el
hecho.
Y nos sorprendemos que llegue una mujer, que había oído hablar de Jesús, como
nosotros, que llevamos tiempo sabiendo cosas de Jesús.
Esta mujer nos revela su pensamiento:
“Con solo tocarle el manto curaré”
Jesús, notando que había salido fuerza de Él,
preguntaba y repetía,
“¿Quién me ha tocado el manto?”
La mujer no se atrevía a decir nada porque
sabía que había actuado mal según la Ley; estando enferma contaminaba
a quien tocaba; pero se acerca asustada
y temblorosa y le confiesa toda la
verdad.
“Hija, tu fe te ha curado,
vete en paz y queda curada”
La hemorroisa quedó curada con solo haber
tocado el manto; Jesús lo que hace es confirmarlo
y enviarla en paz.
No solo la ha curado, sino que nos demuestra que está por encima de
la Ley.
·
Tú y yo ¿qué decimos presenciando la vida de
estos dos personajes?
No nos quedemos indiferentes. Demos respuesta
a la fe testimoniada por esta mujer y por Jairo.
No termina aquí el relato. Todavía estaba
hablando cuando oye Jesús
Tu hija se ha muerto.
¿Para qué molestar más al Maestro?
No temas; basta que tengas fe,
le dice Jesús a Jairo.
La niña no está muerta; está dormida”
Jesús no miente; para Dios la muerte es una dormición del ser humano
para despertar a la vida eterna.
¿Qué
es la muerte para ti y para mí?
Pocos son los testigos de lo que va a
hacer Jesús. Cogió de la mano a la niña,
““Talitha qumi”. “Contigo hablo, niña, levántate”
Jesús vino a demostrar que tiene poder sobre
la muerte y que el Amor es más que la Ley; por esto hizo
algunos milagros para quien quiere ver y oír.
No termines de leer para ir a “tus labores”
sin más. Jesús, Jairo, la mujer y la
niña nos miran.
¿Qué
les decimos tú y yo a cada uno?
F. Allara
SANTORAL DEL DÍA
No hay comentarios:
Publicar un comentario