EL HIJO DE DIOS ENGENDRADO ETERNAMENTE POR EL PADRE
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
PALABRA DE DIOS
5 minutos en nuestro "día a día"
(Clic en los textos para leer)
Lucas 3,15-16.21-22
15 La gente se encontraba en gran expectación y se preguntaba si tal vez Juan sería el Mesías. 16 Pero Juan les dijo a todos: “Yo, ciertamente, os bautizo con agua; pero viene uno que os bautizará con el Espíritu Santo y con fuego. Él es más poderoso que yo, que ni siquiera merezco desatar la correa de sus sandalias. |
Jesús se prepara para su actividad pública (3.21–4.13) Jesús es bautizado 21 Sucedió que cuando Juan estaba bautizando a todos, también Jesús fue bautizado. Y mientras oraba, el cielo se abrió, 22 y el Espíritu Santo bajó sobre él en forma visible, como una paloma, y se oyó una voz del cielo, que decía: “Tú eres mi Hijo amado, a quien he elegido.” |
· Uno
es el bautismo en el Jordán, donde se
ratifica a Juan que Jesús es el Mesías y a Jesús se le confirma la voluntad del
Padre sobre su vocación mesiánica, y
· Otro
el propio bautismo, el del Calvario, donde Cristo es Sacerdote, Víctima y Altar inaugurando con su Bautismo la Iglesia y todos los Sacramentos.
Vivimos de la Muerte de Cristo en la Cruz, resucitado.
Isaías 42,1-4.6-7
Isaías
presenta al Mesías como siervo de Dios, de quien ha tomado
posesión, siendo el Hijo amado
en quien se complace su alma.
Nos
presenta al Mesías muy diferente a lo que fue su Precursor.
La humildad, con la que vive el siervo de Dios, no expresa debilidad, sino decisión sin vacilación y sin desfallecer hasta implantar el derecho y la paz.
Hechos 10,34-38
Pedro
y los demás Apóstoles,
escondidos por miedo a los judíos, desde
la experiencia de Cristo resucitado, perdieron el temor de dar testimonio con sus vidas, hasta el
martirio, anunciando la Verdad de su experiencia.
Ser
testigo de Jesús
es hablar desde la experiencia personal de creerle resucitado.
· Los Apóstoles por
vivir el Hecho de Jesús y,
· Nosotros, no
por lo que conocemos de libros y palabras, sino por la Gracia de creer en
los testigos.
La
fe no es abstracta,
se fundamenta en la Vida, Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo conocida
y transmitida por los Apóstoles y los testigos, hombres y mujeres de la
primitiva Iglesia, y por los Santos
Padres, que nos hablan de los comienzos de la Vida Comunitaria de los
primeros cristianos.
Pedro
dijo:
“Hablo de Jesús de Nazaret. Y sabéis como Dios lo consagró ungiéndolo con el Espíritu Santo (en el Jordán) y con poder, como pasó por el mundo haciendo el bien”
Lucas 3,15-16.21-22
Lucas no
nos presenta la figura de Juan Bautista, sino que atestigua la verdad y la humildad de Juan con la diferencia
de los bautismos:
· El de Juan,
sólo con agua, como purificación de las
conciencias para aceptar al que viene detrás de él,
· Y el de Jesús con Espíritu Santo.
Jesús se
acerca a Juan y es bautizado; revela la importancia de su bautismo.
Él
no necesitaba purificarse ni abrir su conciencia a Dios, pero
su paso por el Jordán le permitió más tarde poder interrogar a sabios y
entendidos:
“El Bautismo de
Juan venía de Dios o de los hombres, a lo que optaron por no contestar.
Pidamos
el Don de la fe,
porque la fe no es abstracta y pasa por creer las experiencias de los
testigos.
Lucas
nos describe la experiencia de Juan.
“Jesús también fue bautizado. Mientras rezaba, se abrió el cielo”
“El cielo se abrió”, aunque
Dios abrió su Ser el día de la
Encarnación, cuando María recibió en su seno al Hijo de Dios por obra del
Espíritu Santo.
“Bajó hacia Jesús el Espíritu Santo en figura corporal
como una paloma y una voz desde el cielo dijo:
Eres
mi Hijo, mi amado, en quien me complazco”
El
Hijo de Dios
no es creado, sino engendrado
eternamente por el Padre.
La
voz del Padre
es la ratificación de la misión de Jesús, verdadero Dios y Hombre, Mesías
llegado para todos en la plenitud de los tiempos.
ü Demos gracias por nuestro bautismo.
ü Conozcamos lo que ha supuesto para
nosotros estar bautizados.
ü Somos parte del Cuerpo resucitado
de Cristo.
ü Agradezcamos vivir resucitados en
Cristo con el Padre.
ü Conozcamos qué es ser miembros de la
Iglesia, Cuerpo visible de Cristo resucitado en el tiempo.
ü Sepamos pedir perdón y ser
humildes para
vivir el Don de Dios.
ü Vivamos la esperanza de llegar a
vivirlo eternamente
El
bautizado
es un ser humano que vive el estado de vida en Dios por la
Gracia.
Pidamos
unos por otros
para que:
ü Este lenguaje no resulte extraño
a los cristianos bautizados y
ü Sepamos dar gracias a una realidad
de vida que sólo es posible desde la Misericordia divina aceptada, creída y
amada.
F.
Allara
SANTORAL DE MAÑANA
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