"ELLOS NO ENTENDÍAN
ESTE LENGUAJE"
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
Animación a la lectura
PALABRA DE DIOS
5 minutos en nuestro "día a día"
(Clic en los textos para leer)
Eclesiástico 11, 9-12,8
Salmos 89
Lucas 9,43-45
La
razón humana
no siempre tiene el favor de ser lógica.
Todos
entendemos el lenguaje del amor; y Dios a lo largo de toda su Historia de Salvación, desde la
Creación, ha usado este lenguaje.
Llegada
la plenitud de los tiempos,
en sentido teológico, Dios ha seguido
hablando el lenguaje del Amor en el Hijo encarnado, que conocemos en la
Humanidad de Jesús de Nazaret.
El
problema de la fe no
es el lenguaje del amor manifestado por Jesús en sus palabras y hechos, sino decir
con su Vida que era Hijo de Dios, que era Dios y Hombre verdadero.
A
veces preferimos que Dios quede en su eterna omnipotencia sin pensar que,
fuera del Pueblo elegido, que vivió su fe desde la experiencia de ser liberados,
nuestra fe se queda en religiosidad sin
experiencia de hechos.
Cuando
Dios se digna visitarnos, nuestra razón tiene dificultad en aceptar
que un hombre sea Dios.
Se
acepta el lenguaje de amor de Jesús y
se afirma que ha sido un buen hombre;
el mejor hombre que haya podido existir, aunque sea Jesús, no nos libera
del interrogante de nuestro origen y destino.
El Pueblo
judío con su fe apoyada
en el poder de Dios único, y la razón humana, no entiende el lenguaje de un Dios en manos de los
hombres condenándolo a muerte.
“Les resultaba tan
oscuro, que no cogían el sentido”
El
mismo lenguaje del amor se vuelve oscuro
· Cuando se expresa con dolor;
· Cuando el sufrimiento del amor no lo causa el mismo amor, sino los que no entienden su lenguaje ni su sentido.
Somos
nosotros los causantes de la condena de
Jesús y de su muerte, como lo somos de los sufrimientos de la Humanidad. La
contradicción está en nosotros, no en Dios.
El
Amor de Dios, desde
el comienzo de su Revelación, es
rectilíneo y claro. Es nuestra mente la que oscurece la claridad de la Luz del Amor.
Jesús nos repite una y otra
vez:
“Meteos bien en la cabeza:
Al Hijo del Hombre lo van a entregar en manos de los hombres”
Así
es el Amor del Dios uno y Trino.
Desde
que se ha revelado está en manos de los hombres.
En
su aparente debilidad humana, siendo “escándalo para los judíos y necedad para los griegos”,
es la omnipotencia y sabiduría divinas y en ellas el sentido y valor del
Amor de eterna Misericordia, lo revelado en la Cruz.
“Les daba miedo preguntarle
sobre el asunto”
Buscamos
la solución a mil cosas de la vida, menos a la de nuestra vida.
Nos
tiene que dar miedo quedarnos en la oscuridad de la fe ante tanto Amor.
F. Allara
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