jueves, 23 de mayo de 2024

 AL PRINCIPIO, DIOS CREÓ 

AL HOMBRE Y A LA MUJER

Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS

Fray Federico Allara O.F.M


Animación a la lectura PALABRA DE DIOS

5 minutos en nuestro "día a día"

(Clic en los textos para leer)


Santiago 5, 9-12

Salmos 102

Marcos 10, 1-12

La enseñanza de Jesús acerca del divorcio
(Mt 19.13-15; Lc 16.18)
Salió Jesús de Cafarnaún y se fue a la región de Judea y a la tierra que está al oriente del Jordán. Allí volvió a reunírsele la gente, y él comenzó de nuevo a enseñar, como tenía por costumbre. Algunos fariseos se acercaron a Jesús, y para tenderle una trampa le preguntaron si al esposo le está permitido separarse de su esposa. Él les contestó:
–¿Qué os mandó Moisés?
Dijeron:
–Moisés permitió despedir a la esposa entregándole un certificado de separación.
Entonces Jesús les dijo:
–Moisés os dio ese mandato por lo tercos que sois. Pero en el principio de la creación, Dios los creó hombre y mujer. Por eso, el hombre dejará a su padre y a su madre para unirse a su esposa, y los dos serán como una sola persona. Así que ya no son dos, sino uno solo. De modo que el hombre no debe separar lo que Dios ha unido.
10 Cuando ya estaban en casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre este asunto. 11 Jesús les dijo:
–El que se separa de su esposa y se casa con otra, comete adulterio contra la primera; 12 y si la mujer deja a su esposo y se casa con otro, también comete adulterio.


DÍA 24 MAYO  CICLO  -B


La gente acudía a Jesús porque no hablaba como los Maestros de la Ley.

Los fariseos no iban con el deseo de conocer la BUENA NOTICIA del REINO  que anunciaba Jesús, sino para comprometerle escandalizados de Él por cumplir la Ley desde la verdad del amor al prójimo y enseñarlo así a las gentes.

Unos fariseos para probarle le dijeron:

“¿El marido puede divorciarse de la mujer?”


La pregunta revela el pensar de aquel tiempo y el suyo farisaico apoyándose en la Ley de Moisés para no cambiar el status del hombre.

¿Por qué no preguntaron si la mujer podía divorciarse del marido?

No sólo los letrados se apoyaban en la Ley de Moisés, sino que su doctrina daba a entender que era el mismo Dios quien había creado al hombre con prioridad de derechos sobre la mujer.

Jesús no tiene miedo de dialogar con quien acude a Él, y se apoya en la misma Ley para decirles:

“¿Qué os ordenó Moisés?”

-          “Moisés permitió escribir el acta de divorcio y repudiarla”


La aplicación de la Ley por los fariseos va por el mismo camino; sin mirar las causas ni tener en cuenta a la mujer, aplican la Ley en nombre de Moisés.

A lo que Jesús les responde:

“Moisés escribió esta prescripción por la dureza de vuestro corazón


Toda ley que desconsidere la igualdad de dignidad y de derechos del hombre y de la mujer no es justa; y lo que no es justo no tiene valor ni autoridad para ser cumplido según conciencia.

·       No se trata de ser jueces de los jueces, sino de ser fieles a la dignidad de todos los seres humanos, sin sentimientos arbitrarios y subjetivos, sino de acuerdo y referencia a la Verdad de Dios, que está sobre toda autoridad humana.

·       No es por subjetividad ni autonomía humana, que sería caer en el mismo error y en el de destruir la ley y toda autoridad.

Jesús, con su respuesta, coloca a Dios en su sitio y también la Ley de Moisés.


“Al principio, Dios creó al hombre y a la mujer”


·       No es primero la cultura y la realidad creadas por nosotros, sobre todo cuando nos alejamos de la Verdad que está por encima de las verdades y, de las autoridades que prescriben las leyes como carga para el prójimo.


“Por esto, el hombre deja padre y madre, para unirse con la esposa,

y ellos forman una sola carne


Antes de intentar solucionar los problemas entre el hombre y la mujer, hay que reconocer el signo de Dios.

Formar una sola carne es signo de la igualdad de ambos desde la creación.

Lo demás puede ser sólo cultura social y prescripciones de la autoridad humana.                                   

F. Allara


SATORAL DEL DÍA

S. VICENTE DE LÉRINS, SACERDOTE




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