domingo, 17 de marzo de 2024

 DIOS AMA Y PERDONA

Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS

Fray Federico Allara O.F.M

Animación a la lectura PALABRA DE DIOS

5 minutos de nuestro "día a día"


Juan 8,1-11

Pero Jesús se dirigió al monte de los Olivos, y al día siguiente, al amanecer, volvió al templo. La gente se le acercó, y él, sentándose, comenzó a enseñarles.
Los maestros de la ley y los fariseos llevaron entonces a una mujer que había sido sorprendida en adulterio. La pusieron en medio de todos los presentes y dijeron a Jesús:
–Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo del adulterio. En nuestra ley, Moisés ordena matar a pedradas a esta clase de mujeres. Y tú, ¿Qué dices?
Preguntaron esto para ponerle a prueba y tener algo de qué acusarle, pero Jesús se inclinó y se puso a escribir en la tierra con el dedo. Luego, como seguían preguntándole, se enderezó y les respondió:
–El que de vosotros esté sin pecado, que le arroje la primera piedra.
Volvió a inclinarse y siguió escribiendo en la tierra. Al oir esto, uno tras otro fueron saliendo, empezando por los más viejos. Cuando Jesús se encontró solo con la mujer, que se había quedado allí, 10 se enderezó y le preguntó:
–Mujer, ¿Dónde están? ¿Ninguno te ha condenado?
11 Contestó ella:
–Ninguno, Señor.
Jesús le dijo:
–Tampoco yo te condeno. Vete y no vuelvas a pecar"

DÍA 18 MARZO  CICLO  -B  


El lugar de oración de Jesús no eran las sinagogas, sino el campo.

Jesús dio ejemplo relacionándose con el Padre en espíritu y verdad, fuera de los templos.

Pero ¡cuidado!, no nos quedemos rezando en cualquier lugar satisfechos por nuestra oración, por más que sea auténtica, porque los bautizados en Cristo formamos parte de su Cuerpo resucitado y este Cuerpo es visible en los miembros que formamos la Comunidad eclesial, y tenemos la obligación de celebrar su memorial hasta que vuelva como hijos que somos de un mismo Padre, y por tanto hermanos que se unen en comunidad para celebrar la fe.

La oración, personal y la comunitaria, es necesario que  sean vividas en espíritu y verdad.

Muchas veces Jesús oraba en el Huerto de Getsemaní.

El texto nos dice que de este Huerto se fue al Templo donde se reunía la gente y les enseñaba.

Los maestros de la Ley y los fariseos, que sabían mucho de la Ley, pero nada del amor al prójimo, le presentan a una mujer sorprendida en adulterio.


“Moisés manda apedrear a estas mujeres


Se olvidan de traer al hombre, porque también era acusado por la Ley; pero a ellos no les preocupaba ni Moisés ni la Ley ni la mujer, que pedían que fuera apedreada, sino Jesús.

Veamos en este texto, en primer lugar, la paz, la serenidad, la sabiduría conocedora de la Ley y el amor de Jesús frente a los que iban a por Él.


“Tú, ¿Qué dices?”


La respuesta es lo que buscaban. Si perdonaba iba contra la Ley y si la aprobaba se desdecía de su amor y perdón ofrecidos como profeta.


“Jesús se agachó y se entretenía dibujando 

en la tierra con el dedo


Como seguían insistiendo dice Jesús:


“Aquel de vosotros que esté sin pecado 

que sea el primero en tirar la piedra”


El que tirara la primera piedra era el testigo. Por esto Jesús dice que sea el primero en tirar la piedra.


“Jesús se volvió a agachar para seguir dibujando 

en la tierra. Se fueron todos

“¿Dónde están? ¿Nadie te ha condenado? 

Tampoco yo te condeno


Hay una diferencia grande entre justificar, condenar y perdonar.

Dios no justifica el pecado; tampoco condena, porque ha venido a salvar a los pecadores, (los “justos” no necesita nada, ni a Dios).

Los que se consideran “justos” suelen juzgar. Un pecador no debe juzgar jamás.


“Vete, y en adelante no peques más


Dios ha venido en Cristo Jesús a liberarnos, a perdonarnos, a reconciliarnos y a consagrarnos en la Verdad.

No nos quedemos con la emoción del texto. 

Aceptemos el don de la fe y creamos en el Dios del Amor y el Perdón

F. Allara


SANTO DEL DÍA

S. CIRILO, OBISPO DE JERUSALÉN Y DOCTOR DE LA IGLESIA

(Clic en el nombre)


VOLVER A VOLAR







No hay comentarios: