LA GRANDEZA HUMANA SEGÚN DIOS
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
Animación a la lectura PALABRA DE DIOS
5 minutos de nuestro "día a día"
DÍA 14 Diciembre CICLO -B
No puedo menos que citar al Santo que hizo de su propia subida la poesía del encuentro de bodas con Cristo, desde la fe y el amor.
En una noche oscura, con ansias,
en amores inflamada, ¡oh dichosa ventura!,
salí sin ser notada estando ya mi casa sosegada.
Quedeme y olvideme, el rostro recliné sobre mi Amado,
cesó y dejeme, dejando mi cuidado
entre las azucenas olvidado.
(S. Juan de la Cruz)
¡Cuánta luz encierra esta noche oscura!
Fe,
duro trabajo del espíritu, permanencia en amor al Amado, empeño en vivir de la sabiduría…
Esta
poesía la hallamos contemplada en los cielos, escrita por el Pensamiento
del Padre, inspirada en el Hijo y embellecida por el Amor del Espíritu Santo.
¿De
quién? De todos los Santos.
No
todos han plasmado su ascenso en
poesía, sin embargo es poesía la vida virginal, la martirial, la de los confesores,
la de cuantos han sellado sus vidas con
la belleza de su amor amando al Amado.
La vida
de Juan Bautista
es una poesía escrita desde una vida que
sólo supo sabor a noche.
Joven
sin padres, tal vez en la luz de las sombras
de las cuevas de Qumrám, vida de desierto, alimentado de langostas y miel del bosque, interrogado
por ser admirado y odiado, identificado
como la voz que grita en el desierto, encarcelado por llamar a la conversión y degollado.
Juan
no disfrutó de Jesús,
saltó
de gozo ante su presencia antes de nacer, lo bautizó en el Jordán contra
su voluntad por reconocer humildemente que no era digno de ser su esclavo, y dio su vida por la Verdad de
Dios.
No
escribió poéticamente su andadura subiendo a Jerusalén, pero nosotros
hacemos poesía contemplando su vida, asombrados por las palabras de Jesús, que no enaltece
a su primo, sino al hombre que,
“nacido de mujer, no ha habido ninguno más grande que él hasta ahora”.
Hasta
ahora, porque,
detrás de él y en medio de todos, venía
el Hombre nacido también de Mujer, que tampoco ha escrito poesía; pero de su Vida han nacido millones de seres que han llenado el mundo y el cielo de la
Belleza de haber vivido de su Amor aprendido.
“Quien tenga oídos que oiga”,
termina diciendo Jesús.
Quien
tenga oídos que sepa escuchar para saber
que Dios no mide la grandeza humana e
inmortal según los parámetros del mundo.
Dios
contempla a los humanos que han
aprendido la Verdad del Amor, vivido divina y humanamente por su
Hijo, y han configurado su vida en Él.
Dios guarda en su corazón la poesía
. de los que han amado y perdonado,
. de
los que han valorado la seguridad de la
pobreza,
viviéndola y dando pan material y espiritual a quien no lo tiene y
. de
los que han hecho de su vida una entrega de amor al Amado.
F.
Allara
EN LA FIESTA DE SAN JUAN DE LA CRUZ
" Los ojos deseados que tengo en mis entrañas dibujados" (S. Juan de la Cruz)
No hay comentarios:
Publicar un comentario