FIESTA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
Animación a la lectura PALABRA DE DIOS
5 minutos de nuestro "día a día"
Gn 3, 9-15.20 - Ef. 1,3-6.11-12
| 9 Pero Dios el Señor llamó al hombre y le preguntó: –¿Dónde estás?e 10 El hombre contestó: –Oí que andabas por el jardín, y tuve miedo porque estoy desnudo. Por eso me escondí. 11 Entonces Dios le preguntó: –¿Y quién te ha dicho que estás desnudo? ¿Acaso has comido del fruto del árbol del que te dije que no comieras? 12 El hombre contestó: –La mujer que me diste por compañera me dio de ese fruto, y yo lo comí. 13 Entonces Dios el Señor preguntó a la mujer: –¿Por qué lo hiciste? Ella respondió: –La serpiente me engañó,f y por eso comí del fruto. 14 Entonces Dios el Señor dijo a la serpiente: –Por esto que has hecho, maldita serás entre todos los demás animales. De hoy en adelante andarás arrastrándote, y comerás tierra. 15 Haré que tú y la mujer seáis enemigas, lo mismo que tu descendencia y su descendencia. Su descendencia te aplastará la cabeza, y tú le morderás el talón. |
20 El hombre llamó Evak a su mujer, pues ella fue la madre de todos los que viven. DÍA 8 Diciembre CICLO -B Dios
creo al hombre para que participara de su gloria desde el principio. No
había distancia entre lo divino y lo
humano. El hombre se esconde de Dios cuando lo pierde. Es
el hombre el que aleja a Dios de su vida y se siente desnudo.
Comienza
el tiempo de revestirse y revestir a Dios,
y el bien de la unidad y amor gratuitos lo convierte en un ser necesario del otro. Dios,
que desea el bien del hombre, le pregunta: ¿Dónde
estás? Dice
Dios: “Haré que seáis enemigos tú y la mujer”. No
es la mujer más pecadora que el hombre. Si
fueron creados iguales, no consideremos a uno culpable de lo que ambos libremente deciden ser.
Un ángel anuncia el nacimiento de Jesús 26 A los seis meses envió Dios al ángel Gabriel a un pueblo de Galilea llamado Nazaret, 27 a visitar a una joven virgen llamada María que estaba comprometida para casarse con un hombre llamado José, descendiente del rey David. 28 El ángel entró donde ella estaba, y le dijo: –¡Te saludo, favorecida de Dios! El Señor está contigo. 29 Cuando vio al ángel, se sorprendió de sus palabras, y se preguntaba qué significaría aquel saludo. 30 El ángel le dijo: –María, no tengas miedo, pues tú gozas del favor de Dios. 31 Ahora vas a quedar encinta: tendrás un hijo y le pondrás por nombre Jesús.32 Será un gran hombre, al que llamarán Hijo del Dios altísimo: y Dios el Señor lo hará rey, como a su antepasado David, 33 y reinará por siempre en la nación de Israel. Su reinado no tendrá fin. 34 María preguntó al ángel: –¿Cómo podrá suceder esto, si no vivo con ningún hombre?t 35 El ángel le contestó: –El Espíritu Santo se posará sobre tiu y el poder del Dios altísimo se posará sobre ti como una nube. Por eso, el niño que va a nacer será llamado Santo e Hijo de Dios. 36 También tu parienta Isabel, a pesar de ser anciana, va a tener un hijo; la que decían que no podía tener hijos está encinta desde hace seis meses. 37 Para Dios no hay nada imposible. 38 Entonces María dijo: –Soy la esclava del Señor. ¡Que Dios haga conmigo como me has dicho! Con esto, el ángel se fue". ¿De
quién es enemigo el mal y quien lo causa? De La
Mujer Inmaculada,
que es signo y figura de la verdad original creada y de cuantos, a
partir de la Redención de Cristo, viven
del don de la Gracia. María
fue la primera que vivió los méritos de Cristo antes de la Redención. Como
Jesús instituyó la Eucaristía antes de celebrarla en el Monte Calvario,
con su Muerte de Cruz y su Resurrección, María
fue concebida sin pecado. María,
llena
de Gracia, llena de Dios, tenía que nacer y ser la que Dios le iba a pedir si quería ser la Madre
de su Hijo. “Dios te salve, llena de Gracia, el
Señor está contigo”. Estaba
llena de Dios, como a nuestra medida
está la Gracia en nosotros. Estar llena de Dios no es tener a Dios realmente en sus entrañas; como no es igual vivir del don de la Gracia que recibir a Cristo sacramentado. “Vas a concebir, darás a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús” Dios
omnipotente ha creado al hombre libre; por esto, toda respuesta
humana es una libre disposición positiva o negativa ante Dios. María
se turbó ante el saludo del Ángel, porque no
conocía varón. “El Espíritu Santo bajará sobre ti y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra, por eso el que va a nacer será santo, se llamará Hijo de Dios” Para
Dios no hay nada imposible si cuenta con la libre aceptación de la
voluntad humana. María contestó: “Aquí está la esclava del Señor, cúmplase en mí lo que has dicho”. Ser
esclavos de Dios es signo de la mayor libertad humana. Dios
nos quiere libres, porque nuestra vocación es de libertad. (St. 1,25). Dios
se ha dado todo dándose a sí mismo. El
Padre envió a su Hijo y ambos nos han
dado el Amor con que se aman en el Espíritu Santo. (Rom. 5,5). Llevamos dentro de nosotros el Amor ágape con que se aman el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. F. Allara Si haces clic sobre el siguiente enlace tendaras información de interés: |
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