CREEMOS EN LA IDENTIDAD DE JESÚS,
DIOS Y HOMBRE VERDADERO,
ENVIADO DEL PADRE
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
PALABRA DE DIOS
5 minutos en nuestro "día a día"
(Haz Clic en los textos para leer y orar)
Hechos 16,1-10 |
Juan 15,18-21
DÍA 24 MAYO CICLO -C
Jesús no
ha venido por su cuenta ni es un hombre cualquiera; precisamente por ser Dios, ha sido capaz de rebajarse
y anonadarse apareciendo ante nosotros, ayer como Hombre verdadero, y
hoy, bajo las especies de pan y vino, como Cristo resucitado.
Tenerle
sólo como uno de los hombres que, ha pasado por el mundo dándonos ejemplo de
bondad, e instrumento de paz es no
creer en su propia identidad.
· La Biblia no
es un libro para leer, sino
para ir a él con la actitud de aceptar que es un libro sagrado.
Es
el libro más leído del mundo, pero el hecho actual de bajo nivel de fe
demuestra que, o sigue siendo simplemente leído, o se ha perdido el deseo de
saber de Dios revelado
· El
Evangelio es dialogo con Cristo resucitado.
Cristo
resucitado ilumina la Verdad de la revelación
desde el principio; y creemos
que Él es, desde antes del principio, el enviado.
Aceptar a Jesús en su
identidad de Dios y Hombre verdadero es creer
en quien lo ha enviado.
La
frase final del texto: “No conocen al que me ha enviado…”
Ayer fue causa
de ser condenado injustamente y, hoy lo
es por seguir siendo no aceptado por muchos “creyentes”, que no entienden
lo que dice Jesús.
“Si el mundo os odia, sabed que
me ha odiado a Mí
antes que a vosotros”
El mundo no es indiferente a la Iglesia y, desde Ella, no lo es con
los que viven a Cristo como testigos.
La tibieza es no ser ni luz ni sombra.
La indefinición ante Jesús es el mejor modo de ser para el mundo y lo aplaude; lo cual
demuestra que, el Hecho Jesucristo
es lo que el mundo odia; sabe
que es el Dios real, que siendo “Amor y Paz” es “el enemigo” que, el mundo no puede vencer.
“Si a Mí me han perseguido,
también a vosotros os perseguirán”
Jesús no pasó por la vida prometiendo
felicidad y alcanzar la vida eterna;
De nuestra parte es optar por Él de forma real, en medio del
mundo en cada tiempo; de
igual modo, como Él tuvo que pasar por el Calvario para volver al Padre,
desear el cielo prometido es
vivirlo “en el aquí de la vida”, no con las cruces que Dios envía, sino por ser perseguidos por seguir a Jesús,
desde una vida pobre e imperfecta que contradice los
principios del mundo.
“No es el siervo más que
el amo”
No hemos de ver el aspecto positivo de
ser odiados y perseguidos, en el sentido que le da la fe, que es ver a Jesús en la Cruz por amor, sino también desde sus palabras de esperanza:
“Si han guardado mi palabra,
también guardarán la vuestra”
Padres, educadores, fieles todos, sembremos
en pobreza la Palabra de Dios; puede que no sea leída ni escuchada ni por
los más cercanos, pero la semilla del amor no dejará de florecer
en algún corazón en el tiempo que Dios tenga previsto.
La
esperanza que tenemos es cierta.
Federico Allara
SANTORAL DEL DÍA
No hay comentarios:
Publicar un comentario