“CREED EN DIOS Y CREED
TAMBIÉN EN MÍ"
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
PALABRA DE DIOS
5 minutos en nuestro "día a día"
(Haz Clic en los textos para leer y orar)
Hechos 13, 26-33
Juan 14,1-6
DÍA 16 MAYO CICLO -C
Tres
puntos, de entre todo lo que se puede recibir
de Dios en este texto.
1. La necesidad que tenemos de creer en
Dios.
¡Cuántas veces hablo de la fe!; no es cualquier sentimiento, que podamos tener desde un sentido
trascendente de la vida; ni tampoco se
puede decir propiamente fe a nuestra forma
habitual de responder desde lo más cotidiano de la existencia.
Deberíamos
pensar y examinar del por qué de cada
cosa que decimos o hacemos; lo que nos puede parecer indiferente
puede no serlo.
¿Te
has preguntado qué haces con
todo lo que recibes de Dios por la mediación que te llega de tantas
partes hoy a tu propia casa?
Al
margen de lo que es fe o no, todo ser
humano necesita creer en algo que,
a su manera, dé sentido y esperanza a su
vida.
· Jesús
nos dice: “Creed en Dios”
No en cualquier dios ni en cualquier cosa. Jesús apunta directamente a Dios.
Al Dios revelado nadie puede llegar sin Jesús, que es el Cristo.
Lo vemos en su mismo Pueblo que, la fe en Dios revelado en hechos, que no puede negar, cuando el mismo Dios se les identifica
en Jesús, dejan
de creer.
2. No es
suficiente nuestra fe en Dios. “Creed
también en Mí”
Para saber si creemos en Jesús no hace falta discernir.
Cogemos el Credo de los Apóstoles y el
Credo niceno, y vemos qué creemos y qué no creemos.
La verdadera fe no es de sentido común
como lo puede ser creer en Dios.
La Verdad de la procedencia de Jesús y su
destino final son de fe; lo entiende
la razón y acepta su contenido como lógico desde el Dios de la
revelación.
3.
“No se turbe
vuestro corazón”
Ø Si no somos indiferentes, nuestro corazón se siente turbado ante
la Verdad de Dios. Su Ser real, conocido por su
acción al exterior, nos permite aceptar
la identidad de Ser Uno y Trino; para deducir que
no es cualquier cosa personal decidir sobre creer o no en Él.
Son los seres humanos más creyentes los que se
turban ante el abismo del Ser de Dios y la realidad de ser criaturas. ¡Dios
existe, y Es Dios!
De ahí la frase de Jesús: “Creed también
en Mí”; conoceréis al Dios de eterna Misericordia revelado
en mi vida, porque el Padre y Yo
somos uno.
Si podemos afirmar que Dios existe, y que su Amor es de eterna Misericordia, es porque
lo ha dicho y lo ha demostrado Él.
Apoyarnos en la Misericordia divina y no
aceptar a Jesús no es del todo lógico.
Ø
Jesús nos habla de la inmortalidad con destino personal y cierto.
También esto es de fe. Nuestras inmortalidades son muy inciertas.
“En la casa de mi Padre hay muchas moradas.
Voy a prepararos un lugar”
Lugar
y morar es en Dios, que no ocupa lugar, pero en Él podemos ser todos.
(Este tema da para mucho, pero la página no da para más).
Federico Allara
SANTORAL DEL DÍA
s. Alejandro, obispo
de Jerusalén y mártir
DIOS ES FIEL
1 comentario:
Hola Evangelio de cada día, gracias por mostrar su trabajo, me gusta y si es posible que lo publiquen diario en mi grupo de facebook cerca de tu corazón, gracias si
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