“AHÍ TENÉIS A UN ISRAELITA
DE VERDAD”
Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS
PALABRA DE DIOS
5 minutos en nuestro "día a día"
Daniel 7, 9-10.13-14
Juan 1,47-51
DÍA 29 SEPTIEMBRE CICLO C
· Los
Evangelios son Palabra de Dios; debemos leerlos con disposición y actitud de fe.
La Palabra de Dios puede dar la fe, pero Dios sabe cuándo y por qué hace un milagro, como lo sabía Jesús, siendo Mesías, como lo sabe ahora, ascendido donde estaba desde el principio.
· La
fe
nos ayuda a “discernir y creer” en lo
esencial de la revelación y, “a
ser sensatos” ante algunas palabras y hechos que ocurren cada día en el mundo;
no nos vuelve “simples” para creer “cualquier cosa” de Dios y del mundo.
No
todas las manifestaciones, en favor de la persona, son revelación
referida a defender la dignidad de los seres humanos de toda la Humanidad; el poder oculta lo que le
conviene y mueve las masas hacia donde le interesa
“Ahí tenéis a un israelita
de verdad, en quien no hay engaño”
¡Qué difícil es “ser verdad”!
- No se trata sólo de no mentir, sino de “ser verdad”, que significa vivir despiertos, y ayudados
por Dios para no caer en engaños políticos y religiosos en la
medida que, pueden ser “parciales y creadores de división” y, no
defender los derechos universales de los seres humanos.
- No sólo para
vivir liberados de colores políticos y de religiosidades, que no
cuentan con los valores de Cristo, sino para ser ciudadanos socialmente comprometidos;
- “Ser uno más desde el Evangelio”, que no es
una fe abstracta, sentimental y “practicante”, sino de compromiso imparcial en favor de
la verdad, que exige rezar,
callar y también denunciar; siendo causa de ser perseguidos, no por el color defendido, sino por Cristo.
“Liberar la libertad”, obrada
por Cristo, no es para que vivamos un cristianismo
fácil y cómodo, alejado de la realidad.
¡Pocos creen en el riesgo del compromiso social de la vida de los Santos!
La frase de Jesús es más importante, desde lo que nos dice la fe, que de la realidad de que Natanael fuera “un israelita sin engaño”, un ser humano que “era verdad” en la integridad de su vida.
· La fe nos dice que Dios nos conoce; no para inquietar
nuestra intimidad, sino para saber
que ALGUIEN sabe de verdad la realidad que somos y que, conociéndonos en bien y en mal,
en sinceridad y en hipocresía, en dudas en fe, en verdad o en mentira, ha sido capaz de venir a visitarnos a cada hogar para mostrarnos, con
palabras y hechos, su Amor y su Perdón.
Esto es conocer el Amor que une, porque no tiene
acepción de personas y es creador de libertad, para “asemejarnos a Él en amar y perdonar”, sin justificar; siendo creadores de paz, que no la crea ninguna
victoria de guerra.
Pregunta sorprendida de Natanael a Jesús: “¿De qué me conoces?,
- “Has de ver cosas mayores…”, que creer sólo por lo que te he dicho, que
te vi debajo de la higuera, que significa “conocer su intimidad”
Es lo fácil y lo difícil de la fe, y el riesgo de serlo en verdad, hoy y siempre.
Que los Santos arcángeles Miguel, Gabriel y
Rafael, y los custodios que nos guardan, nos ayuden a aceptar a Dios hecho visible en Cristo Jesús.
Federico Allara
SANTORAL DEL DÍA
SANTOS ARCÁNGELES MIGUEL, GABRIEL Y RAFAEL
SI YO NO TENGO AMOR
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