miércoles, 14 de mayo de 2025

“VOSOTROS YA ESTÁIS LIMPIOS” 

 Meditación-Oración de la PALABRA DE DIOS

Fray Federico Allara O.F.M 

PALABRA DE DIOS

5 minutos en nuestro "día a día"

(Haz Clic en los textos para leer y orar)

Hechos 13, 13-25

Juan 15,1-7

Alegoría de la vid verdadera
15
“Yo soy la vid verdadera y mi Padre es el viñador. Si uno de mis sarmientos no da fruto, lo corta; pero si da fruto, lo poda y lo limpia para que dé más. Vosotros ya estáis limpios por las palabras que os he hablado. Seguid unidos a mí como yo sigo unido a vosotros. Un sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no está unido a la vid. De igual manera, vosotros no podéis dar fruto si no permanecéis unidos a mí.
“Yo soy la vid y vosotros sois los sarmientos. El que permanece unido a mí y yo unido a él, da mucho fruto; pues sin mí nada podéis hacer. El que no permanece unido a mí será echado fuera, y se secará como los sarmientos que se recogen y se queman en el fuego.
“Si permanecéis unidos a mí, y si sois fieles a mis enseñanzas, pedid lo que queráis y se os dará.

DÍA 14 MAYO  CICLO  -C

! Sería muy interesante que pensáramos en la trascendencia del Bautismo !

Desde la fe, haber sido bautizado, es el don más preciado que ha podido recibir nuestra vida.

Toda persona bautizada, si cayéramos en la cuenta de quienes somos, desearíamos cuidar, custodiar, en su belleza, nuestro cuerpo lavado por el Agua y la Sangre, que manaron del costado abierto de Jesús en la Cruz; no consiste en lavar el cuerpo, sino en crear una conciencia nueva’, que nos hace testigos y misioneros.

“Vosotros ya estáis limpios 

porque os he hablado”

En aquel entonces, haber escuchado a Jesús, era recibir de su Palabra la luz que iluminaba al hombre nuevo. No era el bautismo, pero encaminaba a sus discípulos hacia el Calvario, que es el lugar del Sacramento, del encuentro de la Humanidad con Dios.

·       El bautismo no es un sarmiento injertado a la vid.

·       El bautismo es el mandato de Jesús para que todos conozcan la Buena Noticia del resucitado, y sean bautizados en Nombre de la Trinidad.

El bautizado es miembro del Cuerpo místico resucitado de Cristo; es un ser nuevo resucitado que, si le alcanzara la muerte en el momento iría directo al Padre, porque el bautismo devuelve al paraíso al ser humano que había sido alejado de él.

Desde la fe, sabiéndonos bautizados, es desde donde entendemos a Jesús

“Yo soy la verdadera Vid 

y mi Padre es el labrador”

Jesús decía, y nos dice, con palabras sencillas lo más trascendental para nuestra vida.

El Padre cuida de la Vid y aguarda el fruto de los sarmientos

“Vosotros los sarmientos 

que el Padre poda, para que den más fruto”

Nunca somos sarmientos separados de la vid de parte de Dios.

Somos inteligentes para poder entender las palabras de Jesús resucitado, que dejaban limpios a sus discípulos; y libres para aceptar permanecer en la Vid o vivir como sarmientos aislados que, ni religiosa ni humanamente daremos el fruto que podemos dar permaneciendo en la Vid.

·       Es verdad, si lo pensamos como creyentes, que, “Sin Mí no podéis hacer nada”

Sin su Vida en nuestra vida y sin el Espíritu `nada podemos entender ni razonar debidamente referente al don preciado de la fe, y nada podemos hacer´ que ilumine y trascienda la vida del prójimo moviéndole a la fe.

Lo cual no quiere decir que, la vida del ser humano no pueda ser medio con el que Dios llegue al prójimo. La eficacia es de Dios, no nuestra.

·       Lo importante no es lo que pensamos de Dios sino creer en sus palabras:

“Si permanecéis en Mí, 

y mis palabras permanecen en vosotros, 

pedid lo que deseáis, y se realizará”

Los Santos milagreros pedían el bien del prójimo, nada para sí mismos.

Si nos amamos con fe sabemos lo que podemos pedir y lo que no.  

Federico Allara

SANTORAL DEL DÍA

s. Isidro, labrador



YO SOY LA VID VERDADERA






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